Homosexuales, al menos de vez en cuando, somos todos los humanos que practicamos sexo con otros seres humanos.
-Valerie Tasso-
Por: Guillermo Sáez Álvarez
En el siglo XVI se hablaba de: “pecado nefando” o contra natura de las cuales la más popular era la “sodomía”. El término “homosexualidad” es más moderno y no se usaba en esa época.
La sodomía consiste en el coito ya con una persona indebida, es decir, del mismo sexo “sodomía perfecta”, ya con una persona del mismo sexo en lugar indebido llamada “sodomía imperfecta” ya que se trataba de la penetración anal, la cual era penalizada por considerarse un delito o “pecado”, calificativo este usado en la época.
Quién fuera el confesor en la casa de Sevilla, el jesuita Pedro de León denominó “mariposas” a los que practicaban la sodomía. Se dice que las mariposas tentadas por la atracción de las llamas, vuelan adelante y atrás, cada vez acercándose más al fuego. En un primer vuelo solo se queman un ala, pero la tentación del fuego es demasiado grande.
Revolotea cada vez más cerca y se quema otra parte de sí, hasta que al final se quema totalmente. Los sodomitas que no se enmiendan enloquecidos por el pecado acabarán por fin en el fuego asegura el Padre León. Así contaba un caso que atendió en la Cárcel Real de Sevilla en 1592.
El anterior fragmento viene al caso pasados más de tres siglos debido a los muy recientes escándalos de sodomía, pero de “sodomía indebida” como se denominaba en el siglo XVI que consiste en la penetración anal, que en pleno siglo XXI parece lo más natural del mundo y por lo tanto no es penalizada, salvo uno que otro clérigo que para suavizar un poco las cosas pagará los platos rotos y será expulsado de su congregación.
Hoy día La palabra homosexual se ha generalizado y hasta se ha popularizado el término gringo “gay”, cuando es practicada por adultos que no ocultan sus gustos personales, siendo muy común en la llamada “farándula”, aunque uno que otro político o de cualquier otra profesión trate de disimularla dándoselas de “arrecho”.
La sodomía, o sexo con menores de edad sigue siendo mal vista y considerada delito, pero nadie me venga con el cuento de que no sigue practicándose donde no se debe y especialmente por quienes no deben por razones obvias.
Nota final: por esa época parece que la mujer no contaba para nada, pero el calificativo “gay” es válido para ambos sexos, en cuyo caso si es mujer es llamada lesbiana. A pesar del título, debo aclarar que en las notas que tomé no se menciona a la mujer
Por: Guillermo Sáez Álvarez,
03-05-2014
Fuente: El ideal de la mujer en el
Renacimiento español / (Fragmentos
sobre la homosexualidad masculina)
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